Qué es un mandato de venta
Un mandato de venta se basa en la búsqueda de un potencial comprador para tu compañía. De una manera discreta, pero efectiva, Hök establece unas características que debería tener el comprador, y va al mercado a buscar a aquellas empresas que encajan con el perfil descrito.
Diferencias entre un mandato de venta y un mandato de compra
La principal diferencia entre un mandato de venta y un mandato de compra es que, el vendedor pretende conseguir el precio más alto posible en la transacción, mientras que, el comprador, busca llegar a un acuerdo con el precio más bajo que pueda alcanzar.
Además del importe, hay otras diferencias que son importantes para ambas partes y que vale la pena tener en cuenta antes de llevar a cabo un mandato de compra o un mandato de venta:
- Como vendedor, el objetivo principal es cobrar la mayor cantidad del dinero acordado lo antes que sea posible, reduciendo así el riesgo de impago. En los siguientes períodos, a la cantidad acordada se le deberá aplicar un interés por el riesgo y por la demora. Además, también se buscará establecer el interés más elevado que se pueda para maximizar los beneficios de la transacción.
- Por otro lado, el comprador tendrá siempre la intención de realizar la parte más grande del pago en un futuro. Esto se debe a que, lo más probable, es que la empresa no tenga suficiente cash disponible en el momento de la compra. Haciéndolo así, se reduce la cantidad de deuda que la compañía necesita. De esta manera, los beneficios de la compra ayudarán a pagar la transacción de cara al futuro.
Hök: asesoramiento continuo en tu mandato de venta
Será imprescindible tener un partner como Hök para mantener el contacto con los potenciales compradores, organizando una data room para proporcionar todos aquellos datos que serán necesarios para que realicen una Due Diligence. El siguiente paso será negociar el importe de la transacción, así como las condiciones.